La sarna en perros, así como en otros seres vivos es una enfermedad de la piel causada por ácaros que se alimentan de la sangre y la queratina de los perros. Estos parásitos provocan una inflamación e irritación de la piel que puede derivar en infecciones secundarias, pérdida de pelo y alteraciones del comportamiento.

Existen diferentes tipos de sarna en perros, según el ácaro que la produce y la zona del cuerpo que afecta. Algunos tipos son contagiosos para otros animales e incluso para las personas, por lo que es importante detectarlos y tratarlos a tiempo.

En este artículo te explicamos cuáles son las consecuencias, los síntomas, el tratamiento y la prevención de la sarna en perros.

¿Qué consecuencias tiene la sarna en mi perro?

La sarna puede tener graves consecuencias para la salud y el bienestar de tu perro. Algunas de ellas son:

• Prurito intenso: el picor causado por los ácaros hace que el perro se rasque, se muerda y se frote constantemente, lo que le produce heridas, costras y sangrado.
• Pérdida de pelo: el rascado y la inflamación de la piel provocan que el pelo se caiga, dejando zonas calvas y con aspecto de «piel de elefante».
• Infecciones secundarias: las heridas abiertas son una puerta de entrada para las bacterias y los hongos, que pueden causar infecciones más graves como piodermas o dermatitis.
• Alteraciones del comportamiento: el dolor y el malestar hacen que el perro esté más irritable, nervioso y apático. Puede perder el apetito, el sueño y el interés por jugar o interactuar con otros.
• Problemas inmunológicos: algunos tipos de sarna, como la demodécica, están relacionados con un déficit del sistema inmunitario, que puede hacer al perro más vulnerable a otras enfermedades.

¿Cuáles son los tipos y síntomas de la sarna en perros?

Los síntomas de la sarna en perros pueden variar según el tipo de ácaro que la causa y la zona del cuerpo que afecta. Los más comunes son:

• Sarna sarcóptica: es la más contagiosa y se transmite por contacto directo con otros animales o personas. Afecta principalmente a las orejas, los codos, las patas y el abdomen. Los síntomas son prurito intenso, eritema, costras, alopecia y descamación.
• Sarna demodécica: es la menos contagiosa y se debe a un desequilibrio del sistema inmunitario que permite la proliferación de los ácaros que viven normalmente en la piel. Afecta sobre todo a la cara, el cuello y el tronco. Los síntomas son pérdida de pelo localizada o generalizada, inflamación, pústulas e infecciones secundarias.
• Sarna otodéctica: es la que afecta al oído externo y se transmite por contacto directo o indirecto con otros animales. Los síntomas son prurito intenso en las orejas, sacudidas de cabeza, secreción marrón o negra en el conducto auditivo y mal olor.
• Sarna cheilétiela: es la que afecta al dorso y se transmite por contacto directo o indirecto con otros animales. Los síntomas son prurito leve o moderado, escamas blancas o amarillentas en el pelo y pérdida de brillo.

¿Cómo tratar la sarna en perros?

El tratamiento de la sarna en perros depende del tipo de ácaro que la produce y del estado general del animal. En general, se basa en:

• Medicamentos antiparasitarios: se administran por vía oral, tópica o inyectable para eliminar los ácaros y sus huevos. Pueden ser ivermectina, selamectina, moxidectina o fipronil, entre otros.
• Medicamentos antiinflamatorios: se usan para aliviar el prurito y la inflamación de la piel. Pueden ser corticoides, antihistamínicos o ácidos grasos esenciales.
• Medicamentos antibióticos o antifúngicos: se recetan para tratar las infecciones secundarias que puedan surgir. Pueden ser cefalexina, clindamicina, miconazol o ketoconazol, entre otros.
• Baños medicados: se realizan con champús o soluciones que contienen ingredientes como el azufre, el benceno o la permetrina, que ayudan a eliminar los ácaros y a limpiar la piel.
• Cuidados higiénicos: se recomienda limpiar y desinfectar el entorno del perro, así como sus accesorios y juguetes, para evitar la reinfestación. También se aconseja cepillar el pelo del perro con frecuencia para eliminar las escamas y estimular la circulación sanguínea.

¿Cómo prevenir que mi perro contraiga sarna?

La prevención de la sarna en perros se basa en:

• Evitar el contacto con animales infectados o sospechosos de tener sarna, así como con sus objetos o lugares donde hayan estado.
• Mantener una buena higiene, bañándolo con regularidad y usando productos adecuados para su tipo de piel y pelo.
• Reforzar su sistema inmunitario, ofreciéndole una alimentación equilibrada y de calidad, así como suplementos vitamínicos o probióticos si es necesario.
• Controlar periódicamente a tu mascota, revisando su piel y su pelo en busca de signos de sarna, especialmente si ha estado en contacto con otros animales o ha visitado lugares con riesgo de contagio.
• Acudir al veterinario ante cualquier síntoma o duda sobre la salud del perro, para que le realice un diagnóstico adecuado y le prescriba el tratamiento más apropiado.

Protege a tu perro de la sarna cuidándolo con nuestros veterinarios de Hospital Veterinario Kissa

La sarna es una enfermedad de la piel que puede afectar gravemente a la salud y al bienestar de tu perro. Por eso, es importante conocer sus causas, sus síntomas, su tratamiento y su prevención, para poder actuar a tiempo y evitar complicaciones.

Si crees que tu perro puede tener sarna, no dudes en consultar con nuestros veterinarios de Hospital Veterinario Kissa, que te orientaran sobre el mejor plan de acción para su caso. Recuerda que cuanto antes se detecte y se trate la sarna, más fácil será su recuperación y menor será el riesgo de contagio.

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